lunes, 24 de junio de 2013

LAS FERIAS


   El viernes, lo del ovino. Lo primero que se me ocurre decir es que el sector sigue vivo. Por jubilación u abandono van cerrando las explotaciones menos eficientes, cinco en Villalpando en los últimos años, pero las que quedan, en calidad y cantidad, cubren el hueco con creces. Y allí estaban, sin que nada les paguen, tomándose la molestia de preparar sus mejores ejemplares para llevarlos a la exposición: los hermanos Granado de Caso; Leal Núñez, de la Puente Ferreras; Vidal de la Puente, Esteban Martínez, Juan Carlos Mazariegos, de Villalpando; tres o cuatro de Villamayor; Toñín Alegre de Quintanilla del Monte; de Villanueva del Campo, de Roales de Campos, de Coreses, de Villárdiga, de Cerecinos, de Villalobos,... Treinta y siete expositores en total, ciento y mucho pico de ejemplares. Lo más selecto de la cabaña más selecta de España.

      Mi homenaje a estos profesionales sacrificados mantenedores del sector que más riqueza genera en la comarca.

     La feria multisectorial en la plaza ha estado muy animada. Las ventas irregulares. Había cincuenta y tantos puestos. Es imposible que todos vendieran. Se quejaban los del embutido de caza, venidos de Guadalajara. Pero si tenemos aquí, y en pueblos próximos, unos cuantos embutidores,..., y con precios más baratos. En cambio el de las conservas de Cantabría es el quinto año que repite y se ha ido muy contento. En la caseta de Biomaser ha llamado la atención un quemador de astilla y pelets que puede sustituir a los quemadores de gasóleo en las calderas correspondientes. Con ellos han contactado bastantes futuros clientes. Las estufas y calderas de biomasa se están consolidando a pasos agigantados.

     En cuanto a festejos, lo de los toros de cajón parece no resultó bien. Quizá hubiera sido mas lógico suprimir ese festejo y dejar sólo la novillada en la tarde del sábado.

    A ésta no pude asistir. Hube a esa hora de ir al Alsa a esparar a Sara y su bolsa. Sé que los erales dieron, salvo uno, un magnífico resultado. Que a Antonio Boyano le tocó el mejor, y lo bordó. Además, como el novillo le conocía, había de portarse bien con el amo. Diego tuvo peor suerte, pero salió bien del paso. ¿La entrada?: media escasa; y demasiao para la zona y los tiempos que corren.

    A lo de de Ovicampos vino Maillo, el de la Dipu; más atractiva la presencia del sábado: la "Subde", Clara San Damián, tipazo y guapetona. Además sencilla y afable. ¡Cómo han cambiado los tiempos!. Nada que ver con los Gobernadores Civiles, uniformados, condecorados a quienes recibíamos con arcos y banderitas cuando yo era niño.

    Inevitablemente en el recuerdo de los mayores están nuestras ferías de niños. Nada que ver aquella plaza rural hervidero de rostros curtidos, de rústicos campesinos, de muchachas tapadas, con esta semiurbana de gentes gorditas, blancotas y muchachas en minisort.

    Entre los pequeños goces de los que uno puede disfrutar está la convivencia, el saludo con los de fuera, ver como críos a los que ves de año en año, crecen, o como la mujer embarazada hace nada ya tiene un crío que corre. O la niña de hace nada, ya es mujer impresionante, como María, nieta de Abundio. O enterarte de quienes son nuevos padres, alguno con sorpresa, como Diego García, con un crío igual que él, que anda desde los nueve meses; o lo guapa que es la señora de Juan Carlos "el carpintero", y lo rico que es el crío.

    Bonita la clase de toreo de salón. Los dos novillos salieron noblotes. Trabajo le costaba al "Maestro" que algún muchacho compusiera la figura: el de Sonia y Sevillano, muy pinturero. El nieto de Satur, a la primera embestida descompuso la figura. Y, ¡que haya gente que se niegue a admitir las leyes de la herencia....!

jueves, 13 de junio de 2013

AGRICULTURA Y COTILLEOS





   Salgo casi todos los días al campo. Este año da gusto. Observo, sigo la marcha de las parcelas. Cambia la tonalidad cada día. Las cebadas han ido pasando del verde al amanzanado, al dorado refulgente. Ahora se están poniendo ambarinas. Sus granos a reventar. Nunca había visto cosa igual. Los trigos siguen aún verdes. No tienen tan buena cara. Los fríos de mayo no le sentaron bien. Son frioleros. Algunos se están poniendo pajizos. Además, con tanta agua, a pesar de los herbicidas, al final, en muchos, ha salido bromus. Ayer corté unas espigas y están granando a “cosco lleno”, a pesar de lo anterior.

   Es año de forrajes, si bien de mala calidad. Se han segado forrañas impresionantes: vezas, avenas,…llenas de metralla. Además, los dejados para empacar, casi todos se han mojado. En vista de ello, la mayoría de los ganaderos, para autoconsumo, han optado por el sistema del microensilado: las bolas blancas que se ven salpicando el verde. Aunque de ello hemos hablado, para los profanos les explico: puede la rotoempacadora ir incluso detrás de la segadora, o al día siguiente, formando cilindros de forraje verde, húmedo. La encintadora acoplada los envuelve en plástico. Enormemente apretados, setecientos kilos, apenas si queda aire dentro. Se produce una fermentación anaerobia. Al mes, aproximadamente ese forraje se ha transformado, ha pasado de color verde a grisáceo, ha adquirido un olor agradable, y una enorme apetencia para los rumiantes. Cierto que con un 60% de humedad, un kilo de ese ensilado tiene menos alimento que un kilo de heno, pero es que sé de tierras, con tritical y veza, de las que se han sacado 40.000 kilos por ha. El aprovechamiento de los nutrientes de estas cosechas es muy superior con ensilado que con heno. Otra ventaja es que cuando hay bromus, hierba espiguera, gamaza,…que de seco es dañino para las ovejas, ensilado, queda suave y lo comen todo.

   La cosecha de alfalfa ha sido regular. Esta planta necesita calor en abril, mayo, y sabemos han sido muy fríos. Además, lloviendo cada triqui-traque, poca se ha podido empacar verde, seca, sin mojar. Pacas se han hecho pocas, y buenas menos. La mayoría hemos optado, por las bolas los ganaderos, y por la deshidratadora los labradores, que ahí, ya saben, la acaban de secar y la empacan para los “mustafás”.

   A los girasoles se les ve crecer cada día. ¡Qué rústicos son!. Su raíz pivotante taladra el subsuelo en busca de la humedad del invierno.

   Pero no crean que todo el campo está igual. Hay parcelas para dos mil kilos y otras para ocho mil. Pueden estar, incluso lindero. En todas ha llovido igual y no es particularmente la calidad de los suelos, es la profesionalidad. Bien se notan las parcelas de los no profesionales del campo. Tres factores son los determinantes: climatología, nutrientes (aportados con los fertilizantes químicos, el abono mineral, o a base de abundantes estercoladuras, también dejando la paja y con leguminosas en la rotación) y herbicidas.

   ¿Qué puede dar, por ej., una parcela en la que el “mineral” lo tiraron en reguero, sin esparcir, en la que, además no echan herbicida? ¡Nada!

   Sé, en cambio de otra, he ido a verla de exprofeso, en “La Maya” de Quintanilla que, por haber estado años de alfalfa y haberle metido unas estercoladuras impresionantes, (pero sin mineral) calculo puede dar a 8.000 kilos/ha. Tiene gran densidad de plantas (con 150 kilos/ha de semilla, en siembra directa), muchísimas espigas por metro cuadrado, además muy largas y granadas. Es la típica tierra donde tiras una moneda y no cae al suelo.

   Es un año en el que se demuestra lo cierto de la agricultura sostenible e innovadora, y lo erróneo de ciertas prácticas, tradicionales o modernas:

a).- Inutilidad del barbecho. Es caro, innecesario, improductivo. Más eficiente y rentable es en su lugar una leguminosa, e incluso un girasol, teniendo en cuenta añadirle luego los nutrientes que éste extrae.

b).- Inutilidad del laboreo excesivo. Salvo para el girasol, son innecesarias las labores profundas. La siembra directa y el mínimo laboreo, con rotación, en igualdad de nutrientes y herbicidas, dan, incluso, mejores resultados.

c).- Superdemostrado que con 135 kilos/ha de semilla, en cebada y 150 en trigo, se obtiene igual cosecha que con 200, como muchos hacen, tirando el dinero a lo bobo, olvidándose de la propiedad fundamental de los cereales: el ahijamiento.

d).- La rotación. Señalo, sólo, una de sus ventajas, poco conocida: la sanidad de los cultivos. Con ella se evita el ataque de insectos en los cereales, que tanto se dan en el monocultivo; la nefasia, por ej., que troncha las espigas, y con ello la necesidad de aplicar insecticidas, para lo que hay que preparar enormes roderones en los trigos y contaminar. Nosotros: fitosanitarios, los justos.

Y ahora: ¡que Dios nos libre de una mala nube y de un incendio!.

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COTILLEOS

-Que el Ayuntamiento amenaza con cortar el agua a quienes llevan la tira sin pagar los recibos, unos cuarenta. Y no es porque no tengan, sino porque le echan cara. La deuda total de unos 12.000 euros. Desde que salió en el periódico (aunque les habían requerido varias veces) están corriendo a pagar.

-Que anteayer en el Juzgado de aquí , “un preferentista” ha presentado demanda contra la Caja correspondiente.

-Que va a haber novillada flamenca por la feria. Parece que los precios serán económicos. ¡Venga hombre: todos a los toros!

-Que se va a volver a llenar la plaza de casetas (no me da la gana decir “stand”). Atención a las de BIOMASER Y FORESTAR. En ellas habrá novedades.

-Que el programa de festejos es sencillo pero atractivo. Si con los puestos y un grupico folclórico, ya hay animación.

-Que el grupo musical “La Maquila” tiene un apretado programa de actuaciones.

-Que Juan Sinde, el de “Juanitín” es un figura. Ha vuelto a obtener el primer premio en el concurso de monólogos de las fiestas del “Toro” en Benavente. ¡Con lo que serio que parece en la vida normal!. ¡Cómo me gustaría ver y escuchar en video uno de sus monólogos! ¿No podría mandar uno al blog para reírnos todos?.

-Que, ¡manda huevos!, el alcalde de Castroverde nos da lecciones de ética y de comportamiento como columnista en La Opinión.

-Que Job sigue sin “despasarelarse”. Ha cogido el truco al ir p’a casa cuando le “pisa el macho Pepillo”: pide ayuda a Tasio y le saca los perros guía p’a bajar la Puerta Villa.

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